Un experimento en Princeton del año 2000 consiguió, dicen sus promotores, que unas partículas viajaran 300 veces por encima de la velocidad de la luz, lo que contradeciría los principios de la Teoría de la Relatividad. Los investigadores apuntan incluso que las partículas llegaron a su destino instantes antes de que partieran.
Han pasado 10 años desde el experimento y no he encontrado más información acerca de él.
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