¿Cómo se crean las relaciones de amor y amistad entre las personas? Es algo que ocurre con naturalidad a lo largo del tiempo. Uno no puede imaginar que esto pueda ni siquiera ser analizado, es algo tan etéreo que está fuera del alcance de la ciencia. ¿O o no lo está?
En una Universidad del estado de Nueva York, la Stony Brook University, hay un profesor, el Dr. Arthur Aron, que piensa que este tipo de cosas sí pueden analizarse. De hecho, desarrolló en 1997 un procedimiento mediante el cual consigue que personas que no se conocen, o que apenas se conocen, hablen de sí mismas, de sus vidas, sus emociones, a través de una batería de 36 preguntas durante unos 45 minutos al final de los cuales los participantes reconocen sentirse más cercanos los unos a los otros, intercambian teléfonos e incluso inician relaciones sentimentales que, en algunos casos, han terminado en matrimonios que aun hoy se mantienen.
La idea es concentrar durante esa mágica hora lo que en condiciones normales sucede durante mucho más tiempo. Los participantes se agrupan en parejas y responden uno frente al otro unas preguntas que se mueven gradualmente desde lo más génerico (“Si tuvieras la oportunidad de cenar con una persona famosa de cualquier parte del mundo, ¿a quién elegirías como invitado?”, “¿Hay algo demasiado serio sobre lo que no se puede bromear?”) a lo más personal (“¿Hay algo con lo que has soñado hacer durante mucho tiempo? ¿Por qué no lo has hecho?” o “¿Sientes que tu infancia fue más feliz que la de la mayoría de la gente?”).
¿Sorprendente? Puedes echarle un ojo al listado completo de preguntas.
Las relaciones son más complejas que esto de la cercanía, exiten otros componentes como la lealtad, la dependencia, el compromiso, pero, bueno, será cuestión de darle tiempo a ingeniosos psicólogos como el Dr. Aron para que nos salgan con nuevas ocurrencias.
(Lo que no he logrado es encontrar algún indicio de que esta técnica se utilice en la psicología de la resolución de conflictos, que supongo que tiene todo el sentido del mundo).
(Lo que no he logrado es encontrar algún indicio de que esta técnica se utilice en la psicología de la resolución de conflictos, que supongo que tiene todo el sentido del mundo).
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