Los negacionistas del cambio climático no niegan que el clima cambie, lo que niegan es que este cambio sea causado por el ser humano.
Y tienen razón en que la relación causa-efecto del impacto del ser humano en el clima no está probada. Y es que las relaciones causa-efecto son muy escurridizas, no es fácil distinguirlas de simples, inconexas, correlaciones.
Pero ahí es donde interviene el sentido común. Muchas veces no hace falta una demostración científica para entender que algo está relacionado con algo. De la misma forma que un niño hace diez mil años entendía que la cosa de respirar tenía algo que ver con lo de no morirse, sin método científico y herramientas estadísticas a su disposición, nosotros tenemos que entender que en las últimas décadas hemos afectado el medio ambiente a una escala que, probablemente, está teniendo un impacto en un medio ambiente.
El sentido común, así, a palo seco, tiene su utilidad muchas veces. Utilicémoslo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario