miércoles, 8 de abril de 2020

CoVid-19, inmigrante irregular

Este virus deja en evidencia el artificio de las fronteras, de las identidades nacionales, del patrioterismo. Seres humanos de todos los continentes, de todas las religiones, de todas las orientaciones políticas, sexuales o futboleras lo sufren por igual. Un ser microscópico que nos recuerda que somos más parecidos de lo que pensábamos, que somos ya una aldea global, que esto de la globalización no es un concepto retórico o ambiguo, es una realidad palpable, medida en número de contagios o, por desgracia, en número de muertos.
Amenazas globales como el calentamiento global, el hambre, o las pandemias requieren de acciones globales. Espero que aprendamos algo de toda esta desgracia y empecemos a construir las bases para un gobierno mundial que nos ayude a lidiar con estos problemas en el futuro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario